Todo lo que querías saber sobre iluminación LED y no te atrevías a preguntar (II)

Especificaciones típicas de los LED

 

 

 

 

LED tipo DIP

 

Se especifica con base al diámetro de su cuerpo

3, 5, 8, 10 Y 20 mm

 

 

LED tipo SMD


Se especifica con base a sus dimensiones (largo y ancho)

 

Ejemplo: LED SMD 3528

3.5 mm de largo x 2.8 mm de ancho

 

Algunas medidas son: 1104, 1206, 3528, 3535, 4014, 7020, 3014, 3020, 1210, 2835, 5050, 5630, 5730 y 3030.

 

Evidentemente, hay una relación estrecha entre dimensiones y flujo luminoso.

 

 

LED tipo COB

 

Un componente COB es un arreglo de A x B LED

 

A = número de LED a lo largo

B = número de LED a lo ancho

 

 

LED COB 100 W = 10 x 10 LED de 1 W c/u

LED COB 150 W = 10 x 15 LED de 1 W c/u

LED COB 200 W = 10 x 20 LED de 1 W c/u

LED COB 500 W = 10 x 50 LED de 1 W c/u

Vida útil de los LED

 

Este concepto se refiere a la cantidad de tiempo en la que una lámpara funciona sin sufrir depreciación en su flujo luminoso.

 

La vida útil de una lámpara LED debe ser indicada por los fabricantes de acuerdo a una nomenclatura previamente establecida (L70B10 o L70B50). Estos datos hacen referencia al mantenimiento lumínico durante la vida útil del LED, que puede ser entre 30 mil y 100 mil horas.

 

La nomenclatura L70B50 quiere decir que el 50% de las lámparas va a mantener un flujo luminoso de al menos un 70% a las 50 mil horas. En el caso de la nomenclatura L70B10, el 90% de las lámparas mantendrán un flujo lumínico de 70% a las 50 mil horas.

 

 

 

Otros factores que inciden en la vida útil

 

Aunque los LED ya son diseñados con ciertas especificaciones técnicas, hay otros factores que pueden influir en su tiempo de vida útil:

 

Temperatura

 

El principio básico es sencillo: a menor temperatura, mayor vida útil en un LED.

 

Todo sistema de iluminación genera calor en mayor o menor medida; por ello resulta importante “eliminar” el calor mediante sistemas pasivos (disipadores de aluminio), o sistemas activos (disipadores de aluminio y ventiladores).

 


Efecto mecánico

 

Cuando se fabrique, monte, o se instale una luminaria, hay que cuidar los esfuerzos mecánicos para evitar daños o destrucción parcial o total.

 

 

Consumo de energía

 

Toda lámpara, sin entrar en detalles de su tecnología utilizada, puede operar en un determinado rango de intensidad de corriente y de tensión eléctrica. Para el caso específico de las luminarias LED, Si la corriente eléctrica es baja, se va a liberar menos energía, y, evidentemente, habrá menos generación de calor.

 

 

Humedad

 

Una protección contra humedad (corrosión), es importante para protección de componentes electrónicos en el propio LED o bien, en su controlador. La electrónica es muy sensible a la humedad y, cualquier falla, puede repercutir en la operación del LED en forma negativa.

 

 

Ambiente

 

Hay factores ambientales que inciden negativamente en los LED:

  • Atmósfera corrosiva (en fábricas; en determinados procesos)
  • Salinidad
  • Cloro en piscinas (luminarias sumergibles)

 

 

Controladores o drivers para luminarias LED

 

Una lámpara LED funciona con energía en corriente directa (CD); evidentemente, no es posible conectarla directamente a una línea de corriente alterna (CA).

 

Para poder integrar lámparas LED a un sistema eléctrico en CA, es necesario un dispositivo que adapte y proporcione energía en CD, acorde a las necesidades del LED.

 

Y es aquí donde entra el famoso controlador o drive:

 

Funciones de un driver en una lámpara LED

 

Además de transformar la corriente alterna (CA) en corriente continua (CD), el driver debe adaptar la tensión eléctrica de salida a las necesidades del LED que, generalmente es baja.

 

Un LED, al ser un dispositivo opto electrónico sensible, requiere que los parámetros eléctricos que lo hacen funcionar conlleven calidad absoluta. Parámetros eléctricos perfectamente estables se traducen en luz estable y generación de calor mínima (ya mencionamos con antelación la importancia de una correcta disipación de calor para optimizar la vida útil de una lámpara LED).

 

El driver es, por lo tanto, un dispositivo más que esencial ya que define, en gran medida, el aprovechamiento real de la energía eléctrica que consume un LED.

 

Hay que tener cuidado a la hora de adquirir una luminaria LED y asegurarse de que el driver incorporado es de calidad. Un LED puede tener una vida útil de hasta 100.000 horas, pero si tenemos que cambiar el driver cada 5.000 horas, no estamos optimizando nuestra inversión. Los fabricantes especializados son la mejor apuesta si queremos asegurar nuestra inversión.

 

Muchos proveedores de soluciones LED optan por diseñar y construir sus propios drivers. Lo que a priori puede parecer una ventaja, en realidad suele revelarse como un error, ya que suelen fallar más que los drivers de fabricantes especializados, que además pueden reemplazarse más fácilmente.

 

Los drivers  son cruciales para ayudar a los sistemas de iluminación basadas en LED alcanzar su pleno potencial en términos de larga vida útil, eficiencia energética y otras características beneficiosas.   Recuerde: un controlador LED debería durar tanto como el propio LED.

 

 

Conclusiones

 

Es momento de tomar los catálogos y empezar a ver opciones para un nuevo concepto en cuanto a sistemas de iluminación se refiere.

 

Hasta ahora, hemos visto lo que es, quizá, la información más importante sobre la tecnología LED enfocada a sistemas de iluminación. Evidentemente, existe muchas más información complementaria el respecto pero, con lo que aquí se ha mostrado, basta y sobra para adentrarse de lleno en esta tecnología que, como bien sabemos, aunque se encuentra en plena fase de desarrollo e implementación, es importante empezar a familiarizarse con ella porque… el tiempo no espera.

 

 

 

Con información de:

 

Iluminet (link)

GE Lighting (link)

Osram (link)

El economista (link)

 

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